LAS
CADENAS DE ORACION
DE
NUESTRO CORREO
¿Debo re-enviar la cadena?
Buen día
Padre Jordi:
Acabo de recibir una cadena a San Judas Tadeo donde me dice que debo
reenviarla a otras personas
para no romper esa cadena.
¿Es correcto o debo ignorar ese mensaje?
Respuesta:
Las
cadenas de oración pueden ser buenas. A Dios le agrada que sus hijos
se unan en oración. Los laicos pueden también invitar a la oración y pedir
que se transmita esa petición en cadena.
Pero las
cadenas son censurables cuando se vincula a ellas alguna amenaza o imposición
(Ej.: si no la pasas te ira mal) o se promocionan a base de promesas
de algún bien temporal (Ej.: Si la pasas se te resolverán todos los
problemas). Las famosas cadenas a
San Judas Tadeo suelen ser de
este tipo y, claro, claro está, el venerable santo no tiene culpa del
desvió de algunos devotos. Las cadenas por email presentan un
gran problema ya que con frecuencia son un engaño para recoger
listas de emails. Es mejor pasarlas.
Ver "Cadenas" -Padre Jordi Rivero
¿Debo romper las cadenas
de oración?
Estimado
Padre Jordi Rivero:
Soy sacristán y a veces los feligreses dejan en la entrada del templo
cadenas de oración. Suelo romperlas, porque creo que van contra el
primer mandamiento de la ley de Dios. ¿hago bien en romperlas?
Gracias por su atención.
Respuesta
Estimado en Cristo,
Por medio de las cadenas de oración se busca unir a muchas personas en
oración, generalmente por una intención especial. Esto es muy bueno.
El problema no son las cadenas sino las promesas de éxito o amenazas
contra quien no las rece que algunos pretenden vincular a estas.
Dios puede advertir sobre castigos cuando se violan sus mandatos y
puede hacer promesas a quienes le obedecen. Pero quien advierte
falsamente en nombre de Dios estas cosas es un falso profeta y peca
contra el Primer Mandamiento.
Aunque no podemos juzgar la intención de nadie, la Iglesia si tiene la
responsabilidad de corregir el error y enseñar a orar. Usted hace bien
en quitar de la iglesia las cadenas de oración que contengan amenazas
o promesas. Si encuentra a quien las está propagando, explíquele sus
razones de quitarlas con caridad y respeto.
En los Corazones de Jesús y María,
Padre Jordi Rivero