"La tumba perdida de Jesús" y otras fábulas.
Padre Jordi Rivero,
6 Marzo, 2007
El
4 de marzo, 2007 el Discovery Channel presentó un
"documental" titulado "La Tumba Perdida de Jesús". El productor
de Hollywood James Cameron (Titanic, Verdaderas Mentiras)
y el
periodista Simcha Jacobovici afirman haber descubierto la tumba de Jesús y
de
su familia.
También dicen haber encontrado evidencia de que Jesús tenía un
hijo con María Magdalena.
Después del éxito publicitario del Código DaVinci y el Evangelio
de Judas era de esperar una
nueva revelación sensacionalista sobre los orígenes del
cristianismo. Esperaron a la cuaresma para lanzar la campaña
mediática y una vez mas pretenden seriedad científica, dando a
entender que la fe católica es un mito ahora superado.
¿Cual es la novedad? En
realidad ninguna.
El hallazgo de
diez
osarios (cajas de huesos)
ocurrió hace
27 años
en
Talpiot,
al sur de Jerusalén.
Desde
el
principio, arqueólogos reconocidos
han
descartado la idea de que se tratara de la tumba de Jesús.
En
1996 la BBC
y el London Times
ya habían producido un
documental con los mismos argumentos.
Sin
embargo,
varios
agencias
publicitarias
han
decidido, once años después, hacerse
eco del
cineasta Cameron a pesar de que en
una entrevista
en el "Today Show" de 26 de Febrero
el
reconoció: "Yo no soy arqueólogo, soy productor de cine".
Podría haber precisado:
"productor de cine
ficción".
La atención
del
documental
se
centra en seis de los osarios,
supuestamente pertenecientes a la familia de Jesús. Contienen
los siguientes
nombres
: 1) Yeshua bar Yosef (Jesús hijo de
José); 2) Maria, o Marya; 3) Matya; 4) Yose, (el documental lo
presenta como hermano de Jesús); 5) Mariamene o Mara (el
documental interpreta que es María Magdalena; 6) "Yehuda bar
Yeshua" o Judah, hijo de Jesús. Según
el
experto en estadísticas del documental,
Andrey Feuerverger,
las posibilidades de que esa combinación de nombres pertenezca a
otra familia es de 1 en 600. Pero el mismo Feuerverger reconoce
que sus cálculos dependen de suposiciones que son cuestionables.
"Esas suposiciones no me parecen irracionales, pero debo
recordar que yo no soy un erudito de la Biblia" (1).
El judío Tal Ilan, compilador del reconocido Lexicon de Nombres
Judíos,
rechaza rotundamente que ésta sea la tumba de Jesús. Dice que
los nombres inscritos allí "están en cada tumba de Jerusalén ...
estos son los nombres más comunes que se puede esperar
encontrar".
Por ejemplo, 30% de
las mujeres se llamaban María
y uno de cada 20 hombres se llamaba Yeshua (Jesús). El nombre de
José era aun mas popular que el de Jesús.
Según el documental, expertos en ADN han demostrado que los
restos en el osario de "Jesús" y "Mariamene" no tienen vínculo
genético. ¡Eso
fue
suficiente para que especulen que eran un
matrimonio! Sostienen: "Quizás estaban casados y quizás lo
mantuvieron secreto para proteger la posible dinastía, un
secreto escondido a través del tiempo, un secreto que nosotros
puede que descubramos en la tumba de la santa familia". ¿Llaman a esas
especulaciones investigación
científica?
Un fraude repetido
Esta no es la primera vez que
Jacobovici y el Discovery Channel
han participado en fraudes relacionados con descubrimientos
arqueológicos.
El fraude del "osario de Santiago"
En el año 2002 salió a la luz un osario con la inscripción:
«Jacob [Santiago], hijo de José, hermano de Jesús». En ese año
Jacobovici públicamente apoyó la supuesta autenticidad.
Discovery Channel, la BBC y otros le dieron credibilidad como si
fuera algo ya científicamente comprobado. Algunos dijeron que
este "hallazgo" ponía en duda la doctrina católica sobre la
Virginidad perpetua de María. Pero el "osario de Santiago"
resultó ser un fraude. Los 15 miembros de la Autoridad de
Antigüedades de Israel demostraron por encima de toda duda que
el osario “descubierto” era una falsificación
moderna. Así lo determinó el director de Antigüedades de Israel,
Shuka Dorfman, quien anunció (junio 18, 2003): «El osario es
real. Pero la inscripción es falsa. Lo que significa es que
alguien cogió una caja real y labró la escritura en ella,
probablemente para darle una importancia religiosa».
Lamentablemente los medios de comunicación que tan ampliamente
propagaron el engaño, no hicieron casi nada por rectificarlo.
No solamente Jacobivici nunca se retractó de
su
apoyo a
aquel fraude sino
que ahora
el
mismo protagoniza
otro de la misma especie. Es de notar que el
fraudulento "osario de Santiago" estaba entre los diez osarios
originales encontrados en 1980.
Arqueólogos han denunciado el nuevo libro y documental sobre la
supuesta
tumba de Jesús
Según el documental: "Todos los arqueólogos confirman la
naturaleza del descubrimiento". La verdad es muy diferente:
-Amos Kloner, destacado arqueólogo israelí de la universidad Bar-llan,
arqueólogo oficial del Distrito de Jerusalén, experto en tumbas
de Israel y el primer arqueólogo que examinó el sitio del
descubrimiento en 1980, ha dicho que las conclusiones a que ha
llegado Cameron y Jacobovici no tienen validez arqueológica:
"Solo quieren sacar dinero por eso" (Kloner 26/2/2007,
Associated Press). “Refuto todas sus afirmaciones y esfuerzos
por llamar la atención sobre los descubrimientos. Con todo
respeto, no son arqueólogos”. Kloner dijo a la BBC: "Yo no
acepto la noticia de que fue utilizado por Jesús
o su familia" Kloner afirmó también:
“Es muy poco probable que Jesús y sus parientes tuvieran una
tumba familiar. Ellos eran una familia de Galilea sin vínculos
en Jerusalén. La tumba de Talpiot perteneció en cambio a una
familia de clase media del primer siglo de nuestra era”. Kloner
dijo a CTV que él conocía al menos otros dos osarios con el
nombre "Jesús hijo de José".
Es notable que, al mismo tiempo que Discovery presenta el documental de Cameron, el Museo de Arte de Fort Lauderdale,
Florida, USA, presentaba la exhibición titulada "La Cuna del
Cristianismo", por primera vez fuera de Israel. Esta exhibición
también contiene osarios del primer siglo.
¡Sorpresa! Entre los osarios, hay uno con la inscripción: "Jesus hijo de
José". Otro pertenece a "María". Estos
osarios, que no están relacionados con los del documental, están en gira por Estados
Unidos antes de regresar al Museo de Antigüedades de Israel
donde permanecerán en exhibición permanente. Nadie asociado con
esta exhibición ha hecho reclamos sensacionalistas hasta la
fecha.
-EL Profesor L. Michael White, de la Universidad de Texas, otro
experto en antigüedades,
declaró sobre el documental de Discovery: "Esto es tratar de vender
documentales". Añadió que una serie de pruebas eran necesarias
antes de que una caja de huesos o una inscripción sea
confirmanda como antigüedad. "This is not archeologically
sound,
this is fanfare" (Esto no es arqueológicamente sólido, esto es
fanfarria) (26/2/2006, Reuters).
-Joe Zias, arqueólogo
de
la universidad de
Rockefeller en Jerusalén por 25 años,
asegura:
"Simcha [Jacobovici] no
tiene ninguna credibilidad" (26/2/2006, Catholic League).
El hecho que un par de personas monten un fraude no es
asombroso. Pero lo que estamos observando es una
gigantesca complicidad por parte de numerosos e importantes
medios de comunicación. Según uno de ellos: "El documental
incluye dramáticas recreaciones basadas en la mas reciente
evidencia histórica ilustrando imágenes precisas de Jesús de Nazaret, su familia, sus seguidores, su ministerio, su
crucifixión y su entierro". Decir esto es una mentira que no se
puede explicar fuera de una complicidad maliciosa en contra
de la fe cristiana.
Los cristianos debemos estar concientes de los
crecientes ataques contra la fe y comprender que nuestra lucha no es contra la
verdadera ciencia. Esta es en realidad nuestra
aliada porque siempre corrobora la verdad. Nuestra lucha es contra la mentira que
se disfraza de erudición.
¿Enterrados en Jerusalén?
Desde el comienzo de su ministerio público, los discípulos y la
comunidad de creyentes se convirtió en la verdadera familia de
Jesús.
No existe absolutamente nada que sugiera que Jesús estaba casado. Al contrario. Los
relatos mas antiguos
anulan esa hipótesis.
Si
los
huesos de Jesús hubiesen quedado en una caja sería señal de que
no resucitó. Habría sido
entonces
un impostor
desacreditado. Su familia y seguidores habrían retornado a sus
pueblos de origen como hacían
todos los peregrinos al terminar
la pascua y como hacían los caminantes de Emaus antes de
reconocerlo resucitado.
No tiene sentido que se hubiesen quedado en Jerusalén,
especialmente cuando serían allí muy mal vistos. Por lo tanto habrían sido enterrados en sus pueblos
y
nadie recordaría hoy sus nombres. No estarían
juntos en Jerusalén en una tumba de clase media.
Desde el 1347 los franciscanos han custodiado el lugar que desde la antiguedad se
conoce como el Santo Sepulcro de Jesucristo,
en la Iglesia de la
Resurrección en Jerusalén.
Las investigaciones históricas, arqueológicas y
teológicas coinciden perfectamente dando credibilidad a este
lugar. Ya en el año 44 dC "La Iglesia Madre de Jerusalén tenía
su sede en Sión, visitaba el Jardín del Gólgota y allí celebraba
el "Recuerdo" de los grandes eventos de la Crucifixión, Muerte y
Resurrección del Señor" (Ver:
Santo
Sepulcro). Allí el
sepulcro ha estado vacío desde la Resurrección de Jesús, tal
como dicen los
Evangelios. Por lo tanto
la
resurrección de Jesus fue un hecho
físico.
Muchos fueron testigos de ello. La
transformación de los discípulos y el poder de la verdad que
ellos comunicaron, acompañada por signos y milagros, sería
inexplicable sin la resurrección. Es el mismo poder
transformador de la gracia que hoy también experimentan los
creyentes. Cristo resucitado continua perdonando, sanando y
salvando a quienes le abren el corazón.
Eusebio de Cesarea (265-340), nacido en
Palestina, describe en su "Vida de Constantino", los esfuerzos
del emperador Adriano por hacer desaparecer el Santo Sepulcro,
junto con todos los lugares sagrados de Jerusalén, poniendo
sobre ellos templos paganos:
"En esta cueva sagrada, sucedió entonces que algunas personas
impías y ateas, habían pensado retirarla por completo de la
vista de los hombres. Suponían dentro de su locura que así
podrían ser capaces de obscurecer la verdad de manera efectiva.
Con ese fin trajeron una cantidad de desechos desde lejos y con
mucho esfuerzo recubrieron totalmente el lugar; luego, habiendo
llevado esto a una altura moderada, lo pavimentaron con piedras,
escondiendo la cueva sagrada bajo el masivo montón. Después,
como si su intento se hubiera llevado exitosamente a cabo,
prepararon sobre esta base, un verdadero y truculento sepulcro
de almas, mediante la construcción de un tenebroso altar de
ídolos sin vida para el espíritu impuro al cual llaman Venus y
ofreciendo allí detestables oblaciones en esos profanos y
malditos altares. Porque ellos suponían que su objeto no podía
ser de otra forma totalmente alcanzado, más que enterrando así
la cueva sagrada bajo esas nocivas contaminaciones." (III, XXVI
– véase también el informe de Eusebio sobre el Santo Sepulcro)
Irónicamente, el templo pagano de Adriano,
construido en el siglo II para esconder el Santo Sepulcro, ha
servido para marcar su lugar preciso durante los tiempos de
persecución. Mas tarde el Templo Pagano fue removido, el Santo
Sepulcro fue excavado y la Basílica de la Resurrección fue
construida sobre el. Todo esto está abalado por la arqueología.
En pleno siglo XXI, los medios de
comunicación, como nuevos emperadores, se afanan por lograr con
sus artes mediáticas lo que Adriano no pudo hacer a pesar de su
titánico esfuerzo. Sabemos que jamás podrán destruir la fe en
Cristo resucitado, pero no podemos dormirnos porque seríamos
culpables por el daño que hacen a la fe de muchos. Aprovechemos
la ocasión para dar testimonio de nuestra fe con un nuevo
entusiasmo.
Notas
1 Scientific American.
www.sciam.com
Pos data:
Stephen Pfann, quien apareció
brevemente en el documental "La Tumba Perdida de Jesus" como
perito de la Universidad de Tierra Santa de Jerusalem, ha
publicado un documento refutando las conclusiones del
documental.
Después de analizar la
inscripción griega del osario que, según el documental,
pertenece a María Magdalena, ha dicho que no se puede leer
como "Mariamene" sino que contiene dos nombres escritos por dos
manos diferentes: la primera "Mariame," fue escrita en griego
formal. Mas tarde, cuando se añadieron a la misma caja los
huesos de otra mujer, otro escritor añadió las palabras "kai
Mara" que significa "y Mara." Mara es una variación del nombre
"Marta".
Pfann concluye que el osario no contiene los huesos de "María la
maestra" sino de dos mujeres: "María y Marta".
Esta página
es obra de Las Siervas de los Corazones Traspasados de Jesús y María
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