¿TODAS LAS RELIGIONES SON IGUALES?
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salvador?
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La unicidad y universalidad salvífica
de Cristo y de la Iglesia
«En el mundo globalizado es decisivo el diálogo entre
culturas y religiones; ahora bien, este diálogo no debe caer en el
sincretismo que pone al mismo nivel todo tipo de valores o creencias,
fundiéndolos entre sí..... es necesario un diálogo exigente y profundo entre
culturas y religiones, pero no para nivelarlas todas en un sincretismo
empobrecedor, sino para permitir que se desarrollen en un respeto recíproco
y que trabajen, cada una según su carisma propio, a favor del bien común» -
Benedicto XVI, 30, Marzo, 2007.
Somos capaces de encontrar la verdad.
Nuestra fe se opone a la resignación que considera al ser humano incapaz de
la verdad
Benedicto XVI,
Mariazell, 8,IX,07. Fuente VIS
El impulso hacia la fe cristiana, el comienzo de la Iglesia de
Jesucristo, fue posible porque existían en Israel personas que no se
contentaban con lo acostumbrado, sino que miraban lejos buscando algo más
grande" y "ya que su corazón esperaba, pudieron reconocer en Jesús a aquel
enviado por Dios".
Necesitamos este corazón inquieto y abierto. Es el núcleo de la
peregrinación. Tampoco hoy nos basta ser y pensar como hacen los demás. El
proyecto de nuestra vida va más allá. Nos hace falta (...) ese Dios que nos
ha mostrado su rostro y ha abierto su corazón: Jesucristo. Efectivamente
hay grandes personalidades en la historia que han tenido experiencias bellas
y conmovedoras de Dios. Son, sin embargo, experiencias humanas, con sus
humanas limitaciones. Sólo El es Dios y por eso sólo Él es el puente, que
pone en contacto inmediato a Dios con el ser humano".
Si nosotros llamamos a Cristo "único mediador de la salvación válido para
todos", esto no significa en absoluto desprecio de
las otras religiones ni absolutismo soberbio de nuestro pensamiento, sino
solamente ser conquistados por Aquel que nos ha llegado dentro y colmado de
dones para que nosotros pudiéramos hacer lo mismo con los demás.
De hecho
nuestra fe se opone decididamente a la resignación, que
considera al ser humano incapaz de la verdad, como si ésta fuera
demasiado grande para él. Esta resignación frente a la verdad es el
núcleo de la crisis de Occidente, de Europa. Si para el ser humano no
existe una verdad, en el fondo no puede distinguir entre el bien y el mal.
Y entonces los grandes y maravillosos descubrimientos de la ciencia se hacen
ambiguos: pueden abrir perspectivas importantes (...) para (...) el ser
humano, pero también (...) transformarse en una terrible amenaza".
Necesitamos la verdad. Pero ciertamente, a raíz de nuestra historia,
tenemos miedo de que la fe en la verdad comporte la intolerancia. Si este
miedo, que tiene sus buenas razones históricas, se apodera de nosotros, ha
llegado la hora de mirar a Jesús como lo vemos aquí en el santuario de
Mariazell. Como niño en brazos de su madre (...) y como crucificado. Estas
dos imágenes (...) nos dicen: la verdad no se afirma mediante un poder
externo, (...) se concede al hombre sólo mediante el poder interior de ser
verdadera. La verdad se muestra en el amor.
Y a la petición "¡Muéstranos a Jesús!", "María responde presentándolo en
primer lugar como un niño. Dios se hizo pequeño por nosotros, (...) no viene
con la fuerza exterior, sino con la impotencia de su amor que constituye su
fuerza".
El niño Jesús nos recuerda naturalmente a todos los niños del mundo. (...)
Europa se ha vuelto pobre de niños: queremos todo para nosotros y, quizá, no
nos fiamos demasiado del futuro. Pero la tierra estará privada del futuro
solamente cuando se apaguen las fuerzas del corazón y de la razón iluminada
por el corazón, cuando el rostro de Dios no resplandezca sobre la tierra.
Donde hay Dios hay futuro".
Después, indicando el crucifijo, el Papa afirmó: "Dios no ha redimido al
mundo con la espada, sino con la cruz. Jesús, moribundo, se extiende
(...) en un gesto de abrazo, con el que nos quiere atraer hacia sí".
"¡Mirar a Cristo!". Si lo hacemos nos damos cuenta de que el cristianismo
es algo más y algo distinto de un sistema moral, de una serie de mandatos y
leyes. Es el don de una amistad que perdura en la vida y la muerte (...)
y lleva en sí una gran fuerza moral que necesitamos tanto frente a los retos
de nuestra época. Si con Cristo y su Iglesia releemos de nuevo el Decálogo
del Sinaí (...) nos damos cuenta de que es (...) "ante todo un sí a un Dios
que nos ama y nos guía (...) y sin embargo nos deja nuestra libertad entera
(los tres primeros mandamientos). Es un sí a la familia (cuarto
mandamiento), a la vida (quinto mandamiento), a un amor responsable (sexto
mandamiento), a la responsabilidad social y a la justicia (séptimo
mandamiento), a la verdad (octavo mandamiento), al respeto de los otros y de
lo que les pertenece (noveno y décimo mandamientos). En virtud de la fuerza
de nuestra amistad con el Dios vivo, vivimos este múltiple sí y al mismo
tiempo lo llevamos como indicador de nuestro recorrido en el mundo".
PV-AUSTRIA/HOMILIA/MARIAZELL VIS 070908 (1150)
"SEMILLAS DE VERDAD" EN
LAS RELIGIONES NO CRISTIANAS
Papa Juan Pablo II, Audiencia General del 9 de septiembre, 1998
"Las ´semillas de verdad´ son efecto del Espíritu de verdad que actúa más
allá de los confines visibles del Cuerpo Místico y que sopla donde quiere".
"En todas las auténticas experiencias religiosas, la manifestación más
característica es la oración. (...) Toda auténtica oración es suscitada por el
Espíritu Santo, quien está misteriosamente presente en el corazón de cada hombre".
"A través de la práctica de lo que es bueno en sus propias tradiciones
religiosas, y siguiendo los dictados de su conciencia, los miembros de las otras
religiones responden positivamente a la invitación de Dios y reciben la salvación en
Jesucristo, aunque no lo reconozcan como su Salvador".
El comportamiento de la Iglesia y de los cristianos con respecto a las otras religiones
se caracteriza por "el sincero respeto, la profunda simpatía, y también, cuando es
posible y oportuno, la cordial colaboración. Esto no significa olvidar que Jesucristo es
el único Mediador y Salvador del género humano. Y tampoco atenuar el impulso misionero
al que estamos obligados en obediencia al mandato del Señor resucitado: ¨Id, pues, y
haced discípulos a todas las gentes bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y
del Espíritu Santo".
Esta actitud de respeto y diálogo, concluyó Juan Pablo II, "constituye un debido
reconocimiento de las ¨semillas del Verbo¨ y de los ¨gemidos del Espíritu¨. Y prepara
el anuncio del Evangelio "en espera de los tiempos dispuestos por la misericordia del
Señor".
-Vatican Information Services, AG/ESPIRITU:RELIGIONES/... VIS 980909
(290)
LOS CATÓLICOS DEBEN REDESCUBRIR LA
«RELIGIÓN
VERDADERA»
Intervención
del cardenal Ratzinger en la Sorbona de París PARIS, 9 dic. 1999 (ZENIT).
«Dos mil años, ¿después de qué?».
Este fue el provocador tema de un simposio de tres días, del 25 al 27
de noviembre, organizado por la Universidad Sorbona de París, en el
que fue invitado el Cardenal Joseph Ratzinger, prefecto de la
Congregación vaticana para la Doctrina de la Fe. El encuentro sirvió
para constatar que en estos días de transición hacia el 2000 se
habla mucho de «efecto 2000», pero pocos se preguntan sobre el
nacimiento de Jesús, el auténtico motivo de estas celebraciones.
Como el mismo diario «Le Monde»,
explicó, se trataba de reflexionar «sobre la figura de Cristo y de
su enseñanza en el templo del racionalismo fundado por la II
República».
La intervención del Cardenal Ratzinger
suscitó un interés inesperado, hasta el punto de que el suplemento
dominical de ese diario parisino abrió la portada con la transcripción
íntegra del purpurado bávaro. El prefecto de la
Congregación para la Doctrina de la Fe afrontó las grandes
cuestiones que plantea el cristianismo a la mentalidad laicista,
respondiendo a preguntas como «si se puede aplicar la noción de
verdad a la religión católica o, dicho de otra manera, si el hombre
puede conocer la verdad propiamente dicha sobre Dios y todo lo
divino».
El cristianismo, recuerda Ratzinger,
«tiene la pretensión de la verdad». Pero esto ha provocado poco a
poco en los ambientes filosóficos y científicos progresivas oleadas
de escepticismo, cuando no de hostilidad: «La teoría de la
evolución parece haber superado la doctrina de la creación, los
conocimientos acerca del origen del hombre superado la doctrina del
pecado original». Con el fin de la metafísica, se ha hecho fácil
«reducir los contenidos cristianos a un discurso simbólico, no
atribuirles más verdad que la de los mitos de la historia de las
religiones, y mirarlos como un modo más de experiencia religiosa, que
debe considerarse humildemente al lado de los demás». En definitiva,
concluyó, se corre el riesgo, insidioso y difuso, de la homologación
de confesiones religiosas, rebajando el nivel de todas.
Afrontando claramente este reto
intelectual, el Cardenal Ratzinger sugirió una reflexión lanzando
una mirada a los orígenes del cristianismo. «La fuerza que
transformó el cristianismo en una religión mundial consistió en su
síntesis entre razón, fe y vida; es precisamente esta síntesis la
que se expresa con la breve fórmula religión verdadera».
El auténtico desafío de los
católicos de fin de milenio, según el purpurado, consiste en seguir
convencidos en la profesión de esta religión verdadera en un momento
caracterizado por el relativismo y la tentación del sincretismo. «El
compromiso del católico por devolver a la expresión "religión
verdadera" consistirá en hacer coincidir amor y razón como
pilares fundamentales de lo real: la razón auténtica es el amor y el
amor es la razón auténtica. En su unidad son el fundamento
auténtico y el fin de todo lo real».
Fuente: Zenit ZS99120901
ZENIT es una excelente agencia internacional de información. Visite
su página http://www.zenit.org
El verdadero diálogo religioso
«La mejor manera para avanzar es el diálogo auténtico
entre cristianos y musulmanes, basado en la verdad e inspirado por el sincero
deseo de conocernos mejor mutuamente, respetando las diferencias y reconociendo
lo que tenemos en común». Benedicto XVI, Turquía, 28 Nov.06
Sobre la coherencia en el diálogo
Llaria Morali, teóloga católica
Fuente: Zenit
Recuerdo que el año pasado, en el momento del intercambio con
la asamblea, una persona del público me preguntó si al menos podía aceptar que
Mahoma fue el último de los profetas y el más grande. Dirigiéndome a un público
compuesto de musulmanes, antes de responder, le pregunté a mi vez: «Si yo
hiciera una pregunta análoga sobre Jesucristo, por ejemplo pidiendo a un
profesor musulmán que admita al menos que Jesucristo es tan grande como Mahoma,
¿considerarían que es un buen musulmán si, por complacerme, me diera la razón?
Ustedes preferirían --creo yo-- que fuera coherente con su fe incluso a costa de
disgustarme con su respuesta. Pienso que ustedes quieren de mí una respuesta
como mujer católica y no apreciarían una respuesta de componenda para
complacerles. No me considerarían una buena cristiana católica. Por ello les
respondo como cualquier católico debería responder: con sinceridad y serenidad».
Recuerdo que este razonamiento tocó cuerdas profundas en mis colegas musulmanes
que me manifestaron un gran aprecio por la sinceridad y transparencia
demostrada, y también por mi valor al darles una respuesta que ciertamente no
era totalmente aceptable para un musulmán.
Un profesor me dijo: «doctora Morali, nosotros queremos dialogar con católicos
de verdad, no con católicos a medias, aunque esto sea ciertamente bastante más
difícil. Siga así, por favor».
De
nuestro correo:
Ustedes los católicos son verdaderamente orgullosos...
¿Quién les dijo o les dio la autoridad para proclamarse como
la única religión? ¿Quién o por qué creen que el suyo es el
único Dios?
Alá, Yahvé, Jeová... Llámalo como quiera, pero él es
universal...
¿No se han dado cuenta que todas las religiones suben la
misma montaña por diferentes caminos?
Respuesta
Querido
amigo:
Todas
las
religiones
tienen
semillas
de
verdad
y
en
todas
el hombre sincero puede elevar su corazón a Dios en
oración. Eso creemos.
Pero no todas las
religiones son iguales.
Si las religiones son invento humano, sería cierta tu
tesis: todas
las religiones serían tan solo diferentes caminos al
mismo fin.
Pero en verdad
Dios se ha revelado a los hombres. Nos ha enviado a su
Hijo.
Es cierto que hay un solo Dios y que es
para todos. Pues bien ese Dios tiene derecho de darse a
conocer y lo hizo plenamente en Jesús.
Jesús: "Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va
al Padre sino por mí". Juan 14,6.
Si
creemos en Jesús no queda otra alternativa amorosa sino
compartirlo con todos. Compartir no es imponer sino dar
libremente lo que hemos recibido.
Es cierto que muchos
cristianos
no han
vivido
su fe.
¿Vamos por eso a negarle a otros la oportunidad de
conocerle?
Sería una gran falta de
amor no compartir el don que hemos recibido gratis.
Fe Sí;
Religión NO
En el camino de la búsqueda
espiritual he aprendido que las religiones son
creaciones humanas y mundanas. Es la fe y el credo lo
que es divino.
Yo entiendo perfectamente que como miembro activo y
fervoroso de la iglesia católica le es imposible no
sugerir su credo propio como la mejor opción y de hecho
el único y verdadero camino, pero creo que eso no
deberia implicar el cuestionar irrespetuosamente otras
creencias porque si Jesús hablo de amor entonces
ciertamente nunca clasifico ni dividio a los humanos. De
hecho recuerdo que hay un pasaje de la biblia en el que
él dice "dichosos aquellos que son juzgados por sus
creencias".
RESPUESTA
Querido hermano
Dices las religiones son humanas pero la fe y el credo
es divino. Pero si entendemos el significado de
"religión" como "vincularse a Dios por medio de la fe",
entonces queda claro que en el momento que profesamos
creer en Dios y le respondemos con fe, ya entramos en la
religión. De manera que decir: "tengo fe en Dios pero no
soy religioso" sería una contradicción.
¿Son todas las religiones iguales? En ese caso Dios
tendríamos que concluir que Dios nunca se ha revelado.
¿Acaso Dios no tiene derecho de darse a conocer cada vez
mas claramente? Para eso fue que envió a su Hijo al
mundo. Antes de decir que Jesús es uno mas es necesario
darle la oportunidad de hablarnos al corazón. Mira esto
desde la perspectiva de Dios. Nuestra parte es
responder. MEDITA EL EVANGELIO Y PONDERA LAS ENSEÑANZAS
DE JESUS Y DIME SI DEJA LUGAR PARA RELATIVISMO. El es la
luz que ha brillado en las tinieblas.
Ninguna otra religión fuera de la Cristiana cree que
Dios se hizo hombre por amor a nosotros. Otras solo se
fundamentan en “profetas” que dicen que oyeron a Dios.
Ninguno compara a Cristo.
Si crees que Jesus no es Dios entonces crees que El es
un mentiroso. Si fuera así, no sería ni siquiera un
hombre bueno. Sería un blasfemo ya que el mismo dijo ser
Dios. ¿CREES TU ESO DE JESUS? NO TE PUEDES QUEDAR EN EL
MEDIO. SI O NO.
En los corazones de Jesús y María,
Padre Jordi Rivero
¿TODAS LAS RELIGIONES SON IGUALES?
Padre Jordi Rivero
Podemos decir que todas
las religiones tienen
elementos de la verdad.
Es el mismo Dios a quien los musulmanes llaman "Alá", los
judíos "Yahveh" y los cristianos "Padre". La adoración de todos es
grata a Dios siempre que nazca de un corazón sincero y humilde.
Además, todas estas religiones tienen en común muchas verdades
referentes a Dios, el hombre, el bien y el mal y nuestro destino
eterno.
La Iglesia católica
defiende la libertad religiosa de todos, busca el diálogo y la
colaboración entre las religiones. Ciertamente, nadie debe ser forzado a creer. Pese a los errores
cometidos por algunos en el pasado, la gran mayoría de los misioneros
fueron respetuosos de la libertad de conciencia. No es justo olvidarse
de eso.
El catecismo enseña:
"nadie debe estar obligado contra su voluntad a abrazar la fe. En
efecto, el acto de fe es voluntario por su propia naturaleza"
CIC #
160. Pero el
respeto y la tolerancia no deben conducir al relativismo. Dios nos ha
revelado la verdad sobre si mismo y sobre sus designios para los
hombres y estas verdades son necesarias para la plena realización del
hombre y su salvación.
Dios viene a nuestro
encuentro
El hombre siempre ha buscado a Dios. Buscar es bueno
y necesario, pero siempre
limitado. El hombre por si solo no logra llegar a Dios. Su
religión está llena de torceduras y cegueras causadas por el pecado.
Pero Dios no nos ha abandonado. Comenzó a preparar a la humanidad con
Abraham y, en la plenitud de los tiempos, Dios mismo se ha dado a
conocer plenamente en Su Hijo Jesucristo.
Quien encuentra a
Cristo es
como quien
caminaba en la oscuridad con una vela. Cuando salió el sol todo quedó
iluminado y su camino se hizo rápido y seguro. Ahora es capaz de ver
toda la hermosura del paisaje que antes permanecía en penumbras.
Igualmente, cuando aparece Jesucristo el alma queda iluminada por una
luz inefable de la verdad divina.
Porque tanto amó Dios
al mundo que dio a su Hijo único, para que todo el que crea en él no
perezca, sino que tenga vida eterna. -Juan 3,16
Jesús nos revela con su
vida y sus palabras el infinito amor de Dios por cada uno de nosotros.
El Espíritu Santo nos comunica este amor y nuestra vida es
profundamente transformada y santificada. ¡descubrimos que no solo
existe un Dios sino que somos sus hijos, capaces de participar en su
vida divina! Esta gracia que experimentamos tiene un efecto
transformador manifiesto en nuestro cambio de vida. Somos liberados de
las ataduras del pecado que antes nos dominaban. El encuentro con
Cristo nos capacita para una vida nueva. Esta realidad es testimoniada
en la historia a través de los santos. "Por sus frutos los conoceréis"
-Mateo 7,16.
San Pablo nos relata su
experiencia:
A mí, el menor de
todos los santos, me fue concedida esta gracia: la de anunciar a los
gentiles la inescrutable riqueza de Cristo, y esclarecer cómo se
ha dispensado el Misterio escondido desde siglos en Dios, Creador de
todas las cosas, para que la multiforme sabiduría de Dios sea
ahora manifestada a los Principados y a las Potestades en los cielos,
mediante la Iglesia, conforme al previo designio eterno que
realizó en Cristo Jesús, Señor nuestro, quien, mediante la fe en
él, nos da valor para llegarnos confiadamente a Dios. -Ef 3,8-12.
...al Misterio
escondido desde siglos y generaciones, y manifestado ahora a sus
santos, a quienes Dios quiso dar a conocer cuál es la riqueza de
la gloria de este misterio entre los gentiles, que es Cristo entre
vosotros, la esperanza de la gloria, al cual nosotros
anunciamos, amonestando e instruyendo a todos los hombres con toda
sabiduría, a fin de presentarlos a todos perfectos en Cristo. Por esto
precisamente me afano, luchando con la fuerza de Cristo que actúa
poderosamente en mí. -Colosenses 1,26-29
¿Todas las
religiones son iguales?
La idea de que todas las
religiones son iguales se asocia con apertura y de tolerancia. Pero
primero hay que preguntarse: ¿es
VERDAD que todas son iguales?, ¿Es Jesucristo tan solo un maestro mas, un camino entre muchos válidos
caminos?.
A los que defienden el relativismo les
pregunto: ¿Por qué no practican el relativismo cuando necesitan
atención médica?. En caso de requerir una operación, para
ser consecuentes con el relativismo, deberían decir: "no me importa
quien me haga la cirugía, sea un brujo, un carnicero, un aprendiz o un cirujano
con experiencia. Todos son iguales". En
realidad no somos tan "flexibles" ni "abiertos" para las cosas que
verdaderamente valoramos. ¿Acaso no tenemos cuidado de escoger lo
mejor para nosotros y nuestros seres queridos?. Para eso tenemos
inteligencia. Lo triste es que nos interesa mas
la verdad sobre las cosas materiales que las
espirituales, ponemos mas atención al cuerpo que al alma.
Quien considere a
Cristo tan solo como uno mas de tantos que han hablado de Dios no le
conoce.
El mismo dijo: "Yo soy el Camino, la Verdad y
la Vida"
Díceles él (Jesús):
«Y vosotros ¿quién decís que soy yo?» Simón
Pedro contestó: «Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo.» Replicando
Jesús le dijo: «Bienaventurado eres Simón, hijo de Jonás, porque no te
ha revelado esto la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en los
cielos. -Mateo 16,15-17
Pedro fue escogido por
Jesús para ser el primer Papa. Hasta el fin de los tiempos la Iglesia,
encabezada en la tierra por el Papa, vicario de Cristo, enseñara
siempre la plenitud de la verdad en su magisterio.
Muchas religiones
comparten algunas
verdades. Pero no debemos conformarnos con algunas
verdades cuando podemos conocer a aquel que ES la verdad y fuente de toda la
verdad: Jesucristo. Cristo revela la plenitud de la verdad en su
propia persona. El es Emmanuel, Dios con nosotros. El fundó una
Iglesia y le prometió estar siempre en ella. Le prometió la asistencia perenne
del Espíritu Santo para garantizar que su magisterio contenga siempre toda la
verdad y solo la verdad. Quien ha recibido este
tesoro tiene una obligación por caridad de compartirlo.
Un ejemplo. En vísperas de la visita del Papa a Nigeria, Marzo
1998, se dio la siguiente noticia en los periódicos de la nación:
Nigeria, treinta personas de la tribu de urhobo fueron
sacrificadas a los dioses por una etnia rival, los ijawa, en un
sangriento ritual celebrado en el Sur del país.
Las víctimas - 11 hombres, 10 mujeres y 9 niños
- fueron
masacradas en una ceremonia que tuvo lugar en un Santuario de Oboro,
en el Estado de Bayelsa.
Tiro Agbudje, quien logró escapar con vida junto a su hijo
pequeño, viajaba en una embarcación fluvial con un grupo de
personas de su tribu que se dirigía a una población vecina para
dar el último adiós a un miembro enfermo de la comunidad. De
repente, el grupo fue atacado por los ijawa quienes les obligaron a
acompañarles hasta su poblado.
En el camino, Agbudje logró huir con el hijo, sin embargo,
según afirma, pudo ver la inmolación de sus compañeros bajo la
estatua de una divinidad femenina como conclusión de un ritual
celebrado por el sumo sacerdote. En esta región tienen lugar
frecuentemente enfrentamientos étnicos. Las autoridades han
anunciado el envío a la zona del rito macabro de un destacamento de
la policía para evitar crímenes de este tipo que podrían tener
resonancia mundial en caso de que sucedieran durante la visita del
Papa al país.
ZE980320_4 Zenit
Alguno dirá que también los cristianos se matan unos a
otros y cometen toda clase de crímenes.
Pero hay una diferencia fundamental. Cuando un cristiano asesina no lo
hace por ser cristiano sino por ser mal cristiano. No comete el
delito porque lo mande su religión. Lo que la fe católica enseña está claramente expuesto en su
magisterio y se fundamenta en amor a Dios y amor al prójimo, incluso a
los enemigos.
Utilicemos una analogía: Quien
se
cubre con un paraguas no se moja aunque camine en la
lluvia; de la misma manera quien cierra
su corazón a la gracia no se
santifica ni da buen fruto aunque esté en la Iglesia.
No todo el que me diga:
"Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la
voluntad de mi Padre celestial. -Mateo 7,21
Todos los hombres tienden al mal. Los Cristianos no somos mejores
por nosotros mismos. Si manifestamos una vida superior
es por gracia de Dios, la gloria es de Jesucristo.
Pero llevamos este tesoro en recipientes de barro
para que aparezca que una fuerza tan extraordinaria es de
Dios y no de nosotros. -II
Corintios 4,7
El bien supremo es Cristo, quien vino para todos y
nos mando comunicar su Evangelio a todos. Solo en El podremos todos vivir
plenamente como verdaderos hijos de Dios. Todos tienen derecho a
conocer a Jesucristo y hemos de hacer todo lo posible para que todos
puedan encontrarlo. El Cristianismo no es para un grupo étnico sino
para todos.
Muchas veces los nuevos conversos al cristianismo nos
dan ejemplo.
Un ejemplo:
ONITSHA, 19 marzo, 1998 (ZENIT).
Uno de los capítulos más sugestivos de la epopeya misionera en
Nigeria es la leyenda de los reyes cristianos: hombres potentes y
temidos que renunciaron a muchas prerrogativas para seguir a Cristo.
En la región «ibo» (sudeste de Nigeria), el más famoso fue el
rey Idigo de Agulcri quien, en 1891, después de haber renunciado a
todos sus fetiches y a seis de sus siete mujeres, se fue a vivir con
misioneros en una aldea de leprosos, antiguos esclavos, y de
ancianas acusadas de hechicería.Otro ejemplo es el rey Nigeriano
Nzedegwu II quién fue entrevistado por Zenit.
- Nzedegwu II: Quise que quedara claro que yo quería ser un rey
cristiano y que, por consiguiente, cumpliría sólo con las
funciones compatibles con mi fe, es decir: no aceptaría el título
de gran sacerdote ni ofrecería sacrificios a los espíritus. Mi
funeral debería ser cristiano.
- ¿Cuál es la diferencia entre el funeral de un rey cristiano
y el de un rey pagano?
- Nzedegwu II: La muerte de un rey pagano va acompañada del
sacrificio de sus concubinas y de sus siervos, que quedan enterrados
en la tumba con él.
A mi muerte no se derramará sangre, el arzobispo será el
primero en ser informado y se ocupará del rito fúnebre.
- La gran mayoría de los «ibos» es cristiana, pero entre sus
súbditos hay también paganos. ¿Cómo se comporta con ellos?
- Nzedegwu II: A veces vienen a pedirme animales para
sacrificarlos en su santuario, pero me opongo a entregárselos
vivos. Si quieren, los mato yo aquí, en mi casa, y luego se los
entrego. Les invito a rezar conmigo, pero no me asocio de ningún
modo a los sacrificios a los espíritus.
- Como el padre Tansi, también Su Majestad ha tenido que
renunciar a muchas cosas para seguir a Jesús. ¿Ha sido difícil?
- Nzedegwu II: No he sido yo quien ha hecho todo esto, mi fe es
obra de Dios. Ahora puedo hablar a Dios en mi lengua y estoy seguro
que comprende lo que le digo. Hay un ángel de la guarda que vigila
sobre mí. Los paganos temen a los espíritus y les ofrecen
sacrificios continuamente. Yo sé que Jesús se sacrificó por mí,
y lo único que tengo que hacer es rezar.
ZE980319_4 Zenit
Bien comprendieron estos reyes que Cristo es EL CAMINO y no
meramente un camino más.
Quien busca
encuentra
"Porque todo el que pide recibe; el que busca, halla; y al
que llama,
se le abrirá" -Mateo 7,8.
A medida que descubrimos la verdad somos capaces de hacer mejores
decisiones. Apremia, por lo tanto, esmerarse en conocer la verdad y no
conformarse con cualquier cosa. Buscar la verdad requiere mucho
esfuerzo y honestidad.
Debemos respetar la
conciencia de todos pero eso no significa que dejemos de compartir el
tesoro que hemos recibido. Jesús vino para salvar a toda la humanidad
y llevar a todos a una nueva relación con Dios. "Y les dijo: «Id por
todo el mundo y proclamad la Buena Nueva a toda la creación." -Marcos
16,15.
No hacemos ningún bien pretendiendo
que todo es igual. Esa actitud es frecuentemente un
escape para eximirnos de nuestra responsabilidad y una falta de amor a
nuestros hermanos que buscan la verdad.
DE
NUESTRO CORREO
¿ES LO MISMO CUALQUIER
RELIGION?
¡Hola! me considero cristiana pero sin embargo me
acosa una duda: ¿podrá ser que todas las religiones (digo las grandes
religiones) cuyo punto central siempre es un Dios (Ala, Buda, Cristo)
que por sí mismo y por sus profetas propone una existencia del ser
humano como hombre bueno, sin dañarse ni hacer daño a nadie,
cumpliendo unos preceptos, SON UNA SOLA? Esto daría obviamente a
pensar que en verdad la religión es producto del ser humano, que en
algún momento a tenido necesidad de creer y ha inventado su "Dios" o
también podría interpretarse como que Dios es UNO SOLO pero que cada
nación o grupo lo PERCIBE de diferente forma. Puede suceder con Dios
lo que sucede con la virgen, ¿no? En Lourdes fue percibida como una
mujer maravillosa de piel blanquecina, pero en Guadalupe permitió que
se la percibiera como una mujer con rasgos indígenas y morena ¿podría
ser?. ¿Será que estoy pecando por pensar? Al Señor le agrada que uno
piense estas cosas o preferirá que nos limitemos a lo que ustedes nos
enseñan de El?
Gracias. ___
RESPUESTA
No no se
peca por pensar. El pecado sería si hay orgullo u obstinación. Es
bueno que piense y busque la verdad utilizando el intelecto que Dios
le ha dado pero con confianza en Dios.
Es cierto
que las mayores religiones tienen en común elementos de verdad. Sin
embargo Dios ha querido revelarse plenamente enviando a Su Hijo al
mundo. Ha manifestado su amor y su salvación muriendo por nosotros en
la Cruz. La fe católica reconoce las verdades que se encuentran en las
diversas religiones pero ha de ser fiel a la riqueza inagotable que es
Jesucristo. Solo Cristo es Dios y hombre verdadero, solo Cristo es la
cabeza de la Iglesia, perdona pecados, da vida eterna, restaura al
hombre, a la familia y la sociedad. Estas verdades no son
meramente ideas abstractas, su poder es manifiesto en la vida de los
creyentes. Quien ha experimentado el poder de Cristo en su vida sabe
que no es una idea meramente humana.
La comparación que hace
entre las religiones y las diferentes advocaciones a María Santísima
no es válida. Las devociones a Nuestra Madre dentro de la Iglesia
tienen diversas costumbres, nombres y representaciones, pero los
devotos católicos creen la misma doctrina sobre ella. No sería una
devoción mariana católica si se desvía de la doctrina de la Iglesia. Las diferencias entre las religiones no
son meramente "percepciones" de la misma realidad. De
el mensaje de
Cristo es único porque El mismo es el único camino al Padre.
Mas sobre este tema en
el artículo de arriba
Dios la bendiga.
Padre Jordi Rivero